23 septiembre 2009

Difundid mi palabra

La forma en que una empresa se relaciona con el mercado ha evolucionado de manera asombrosa en los últimos años. De una relación cliente-comprador pura y dura se ha pasado al concepto de "marca amiga".

Esta nueva realidad ofrece una empresa viva, que cuenta con la opinión del consumidor a través de facebooks o twitters, que premia su fidelidad con regalos y promociones, que se solidariza con sus causas plantando árboles en el amazonas o disminuyendo sus emisiones de gases contaminantes.

Sin embargo hay una compañía que no responde a este esquema de "evolución natural" que puebla el panorama empresarial. Y no lo hace porque tiene su propio sistema. Hace unos años Apple estaba a punto de desaparecer y hoy se ha convertido en todo un referente del mundo de la ... moda?... informática?? bueno, en todo un referente.

Tanto es así que ha conseguido algo sin precedentes en el mundo empresarial: que tus clientes sean tus mejores comerciales. A estos clientes se les ha concedido el sobrenombre de "Apóstoles" ya que se dedican a evangeilizar con la Palabra de Jobs allá por donde van. Los consumidores, con Ipods sobre sus cabezas cual lenguas de fuego comienzan a hablar en idiomas extraños sobre las bondades de sus aparatitos tecnológicos convenciendo y convirtiendo a su nueva religión a calquiera que desee escucharle.

Pero, ¿qué de verdad hay en todo esto?
Antes de seguir tengo que decir que no soy poseedor ni de un Mac, ni de un Iphone, ni Ipod... digamos que en este sentido son ateo. De verdad que he dedicado tiempo a estudiarlos, a conocer sus posibilidades y limitaciones, a compararlos con su competencia... y tras todo esto he lleagado a la conclusión que más que una religión son una Secta. Intentan convencerte, lavarte el cerebro para venderte algo que costando el doble, tiene las mismas (o menos) funcionalidades que el resto.
Sí, es cierto, que si los virus y todo eso, que si el malvado Sr. Gates y su imperio monopolista, todo eso está muy bien pero por favor señores, ¡si acaban de desarrollar una opción que permite copiar y pegar! Seamos objetivos, cualquier pda o teléfono móvil de hace 10 años que funcioara bajo windows tenía ya esa opción. Pero los señores de Apple no se conforman con desarrollarlo una década más tarde sino que además lo anuncian a bombo y platillo con una campaña de televisión. Tras esto, sus apóstoles, una vez descargada la aplicación (porque tienes que descargártela) van presumiendo por ahí de lo último que ha aprendido a hacer su aparato, cuando lo que realmente deberían decir es que ha sido el último en aprenderlo.

Apple lo ha montado muy bien, ha convertido un odenador o un reproductor mp3 en aparatos de diseño, objetos de coleccionista. Ha sabido convencer desde informáticos hasta aunténticos negados tecnológicos. Llevar un juguete de Apple es cool, son bonitos y te distingue, aunque cada vez menos, del resto. Ahora bien, de ahí a que sea el salvador tecnológico de la humanidad, garante de las leyes no escritas de la informática y custodio del Secreto Binario va un trecho.

Y a mi, personalmente, ya me empiezan a cansar sobremanera estos falsos profetas.

8 comentarios :

Pink Sugar dijo...

Jajajaja, Sach noto cierto enfado en tus palabras pero sí que tienes algo de razón porque es muy curioso escuchar a estos "apóstoles" venderte la marca, qué orgullosos se sienten de haber adquirido uno de sus aparatitos pese a que como sabéis no son nada baratos, además no sé si os habéis dado cuenta pero utilizan un discurso parecido sobre todo con el tema del Mac, que manera de poner verde al Pc...Sea como fuere el caso es que Apple lo ha sabido hacer y no hay mejor publicidad, que quien tiene tu marca hable bien de ella, y de eso con esta gente no hay duda.

Chaconix dijo...

Yo tengo un mac, y un ipod, pero no me considero un apostol.

Si que digo que con el mac no he tenido ningun problema ni de aprendizaje, ni de adaptación y que va como la seda. A pesar de eso echo de menos alguna caracteristica de Windows.

Sach dijo...

Resquemor ninguno Rosita, allá cada uno con sus cuartos y en qué los invierta. Pero es que algunos de estos apóstoles parecen cegados por la luz celestial y no hay manera de que vean más allá.

Excepciones hay siempre Chaconix y de la tuya doy fe probada.
Lo de echar de menos al Windows debe ser algo así como el Síndrome de Estocolmo pero en informática

Pink Sugar dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Pink Sugar dijo...

Jajajaj, qué bueno lo del Síndrome de Estocolmo, es cierto porque es fácil odiar a Windows...Tiene razón Chaconix hay excepciones, como en todo, pero jolín no me digáis que este año no habéis aguantado a algún amiguete pesado presumiendo de su nuevo Iphone?

Chaconix dijo...

Rebauticemos el sindrome de Estocolmo para informaticos como:

"El sindrome de Redmon" por ser esta la sede oficial de Microsoft.

Anónimo dijo...

Hay que reconocer que somos como las mujeres a la hora de fardar, en vez de comprarnos unos zapatos nos pillamos el último aparatito electrónico y se lo enseñamos a todos los amigos. De todas formas cuando apple saca el iphone con una mierda de cámara y se lleva el pastel, ¿será que habrá estudiado lo que le gusta más a la gente de un móvil?. Ahí lo dejo

Sach dijo...

Exácto anónimo, como una mujer con zapatos nuevos. Y añadiría: da igual que sean incómodos, que rocen o que suden, nosotros vamos presumiendo por ahí con nuestros aparatos aunque no lo merezca. Ya sabes lo que dicen, antes muerta que sencilla.

 
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